Mi cercanía con la orden  se remonta a mi niñez  donde  recuerdo las visitas de  los hermanos en casa de mis abuelos  en su función  mendicante  y luego acompañando a mi papa   en su sitio  de trabajo ,donde observe con su ejemplo lo que es  ser parte de la familia juandediana. Ahora  durante  estos 22 años  de  compartir y trabajar por  la Orden de San Juan de Dios  desde  diferentes ámbitos  profesionales , primero como hospitalario  de Neurocirugía  , luego en el Departamento  de  pediatría y por último  en  el servicio de Neonatología  donde me he  desempeñado como  colaborador y desde hace 10 años  gestor  de este servicio. RECUERDO que desde el primer momento  sentí  algo especial   al ser parte  de esta Orden  , como laico comprometido  me siento orgulloso  porque  he podido desarrollar  mi proyecto de vida   no solo personal, espiritual sino profesional, dando  a conocer mi vocación de servicio  y llevando en alto el lema de nuestro fundador “ hacer el bien, bien hecho”.

Recuerdo con gratitud a todos los hermanos y padres  de la comunidad  por el apoyo  incondicional  que me han dado y por haber compartido no solo los momentos  buenos  ,sino las dificultades  que  no se apartan  de  nuestro andar. SIEMPRE COMPROMETIDOS  CON LA LABOR  QUE DESEMPEÑAMOS PARA EL BIEN DE LOS MAS VULNERABLES Y SUS FAMILIAS.