Para mi la hospitalidad es….

Para una persona como yo que se ve obligada a pensar en términos empresariales y económicos, es difícil no perder de vista la hospitalidad. Como administrador de un centro para ancianos considerar la hospitalidad a pesar de las presiones económicas es un desafío, hay que darle más espacio que a todas las demás cosas.

Una experiencia clave en este sentido ha sido para mí un peregrinaje a Granada al que pude participar en 2009. Hechizado por esa esplendida ciudad, he recorrido los pasos de San Juan de Dios realizando que el Santo fue capaz de renunciar completamente a sus propias necesidades para dedicarse sólo a los demás. La memoria de este peregrinaje me ayuda, aunque no siempre, a recordar los principios de San Juan de Dios ya  actuar de forma coherente. Estoy muy agradecido por esta experiencia.

En mi actividad como administrador del centro para ancianos de los Hermanos de San Juan de Dios de Neoburgo en Alemania, hospitalidad significa para mí en primer lugar, relacionarme de manera amable y cordial con los huéspedes del centro. Esto para mí es un aspecto central.

Además, yo también si he de ir al médico aprecio que me traten con amabilidad y cordialidad. Por lo tanto me esfuerzo por dedicar el tiempo justo a escuchar todas las solicitudes de nuestros huéspedes. Al mismo tiempo me preocupo por darle a la persona anciana la sensación de que es tratada con equidad.