« La hospitalidad no tiene fronteras »

Impactados por el mensaje de San Juan de Dios y sensibles ante la demanda de ayuda de los hermanos de San Juan de Dios de Togo, Anny, mi esposa y yo mismo, no podíamos permanecer insensibles. Nuestro amor conyugal ha crecido en la Fe y en la Caridad y cerca de los Hermanos ya que con ellos hemos desarrollado toda nuestra actividad profesional en la clínica Oudinot. 

Nuestro compromiso y nuestro apego al carisma de la Hospitalidad nos han impulsado a salir fuera de nuestras fronteras. En efecto, precisamente durante un encuentro celebrado en la comunidad de la Rue Oudinot nació en nosotros el deseo de salir en misión hacia África. Este impulso nos ha llevado a realizar varias misiones humanitarias en Togo y Benín. Con el tiempo nació la Asociación de los « Amigos de Afagnan y Tanguiéta » . Hoy en día muchas personas colaboran con los Hermanos y con nuestro pequeño grupo apoyando las misiones de África con su generosidad.

Siguiendo el ejemplo de San Juan de Dios, cuyo objetivo era aliviar y consolar, sin buscar ninguna gloria, decidimos  salir en misión para formar a los médicos africanos por el bien de los enfermos. El choque cultural fue duro… pero gracias a la calidez de la Hospitalidad y a la Fe de las Comunidades nos dimos cuenta que en realidad  recibimos mucho más de lo que damos.