Soy Andrea Marín Arcila, docente voluntaria del área de teatro en la Clínica San Juan de Dios Manizales. Llevo desde el año 2009 trabajando con un grupo de pacientes que se atrevieron a soñar y a creer que el arte podía liberarlos de los muros que antes habitaban su imaginación.

Si alguien me preguntara, qué sentido tiene tanto para ellos como para mí el teatro en sus mentes? lo que yo diría es que ese sentido es simplemente la Expresión. Ellos tienen dificultades para expresarse; han asociado todo los pensamientos  que tienen en su cabeza con una actividad artística y creativa, y es allí, en las clases, donde los pueden explorar, expresar y decir.

La hospitalidad no es otra cosa que acoger con amor y generosidad a los invitados o a los extraños. Como docente he aprendido a recibir a aquellos que no tenían un lugar para aprender; como ser humano he ganado un montón de amigos que juegan conmigo.

“Bueno, la clase de la señorita Andrea es buena y expresiva. Es algo muy lindo. He aprendido a estar un poco menos confundido. Que rico estar aquí.”

El sentido de hospitalidad que nos une a los pacientes y a mí, es el deseo de querer decirle algo al mundo. Nos une el grupo de teatro “La Brújula Mágica” que hemos creado con el ánimo de no dejar de soñar.  Su lenguaje  no es una estampida de dislexias, ni tampoco una ensalada de palabras, es un enjambre de mariposas que quieren volar.