Jorge A. Cardona Zapata

 

365 TESTIMÓNIOS DE HOSPITALIDAD

Colaborador

Colombia

Jorge A. Cardona Zapata

 

Hoy recuerdo la impresión que me dejó aquella imagen  de San Juan de Dios, verlo ahí cargando en sus hombros a un hombre desvanecido, que refleja en su mirada el dolor, dolor causado por inclemencias del destino, una imagen que sólo puede proyectarse en ella el AMOR por el desvalido, por el necesitado, por el abandonado.

AMOR que sólo a cristo se le detectó al morir en una cruz para desmantelar del hombre su pecado, AMOR que sólo a él se le ocurrió dejar como legado, a cada uno de nosotros, laicos presentes atendiendo ese llamado, de servir al menos fuerte y discriminado, enseñándonos a estar abiertos, para mostrar con criterio la hermandad en un voto de hospitalidad, reflejando ese carisma, que como elegido emerge, cada vez que atendió a un ser desprotegido, brindando una palabra de aliento, creando lazos de confianza y fraternidad, al que ha sido señalado.

Y fue con el pasar de los años, pude entender del hombre su comportamiento y he podido captar muchas veces el propósito, de su pensamiento, ya que hasta aquí he llegado, nada bueno en el momento le ha pasado. Pues no está así por su voluntad, sino por algo turbio que hay en su interior, ese algo que quiere que yo cargue en un costado o en mi hombro, siempre y cuando esté dispuesto a ayudarle con AMOR y mi corazón abierto.

Por eso enriquecer mi espíritu fue muy fácil y más por ese acierto de venir a esta casa, hoy me encuentro satisfecho de ver esa comunidad importante y desolada que siempre encuentra espacio abierto y un refugio donde pone en claro sus ideas.

Gracias a ese espíritu Juandediano que recupera su aliento. 

 

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