Solemnidad del Patrocinio de Santa María Virgen
Carta Circular del Superior General
A toda la Familia Hospitalaria de
San Juan de Dios.
El próximo sábado, 16 de noviembre
celebramos la solemnidad del Patrocinio de Santa María Virgen sobre la Orden
Hospitalaria de San Juan de Dios, y con tal motivo os envío mi felicitación con
el deseo de que todos celebremos con alegría la fiesta de nuestra Madre y
Patrona.
Hemos terminado hace unos días el LXX
Capítulo General de la Orden que hemos celebrado en Częstochowa (Polonia) durante los días 15 de octubre al 7 de
noviembre. En el santuario de Jasna Góra, a los pies de la Virgen Negra hemos
vivido una experiencia inolvidable de hospitalidad, fraternidad y sinodalidad,
todos los que hemos participado en el Capítulo General: Hermanos y
Colaboradores, personal de secretaría, intérpretes y otras personas que nos han
ayudado para que todo se desarrollase adecuadamente. Agradecemos especialmente a la Provincia de Polonia, por su hospitalidad y sus
desvelos para que todo fuese muy bien, como así ha sido. Todos, bajo el manto de
Nuestra Madre, hemos vivido la experiencia del Capítulo, en el que hemos
construido las bases para una nueva etapa de la Orden, que estamos comenzando y
en la que somos llamados a responder a los muchos desafíos de un mundo en
continuos cambios.
El Capítulo General ha reafirmado
que el futuro para nuestra Familia de San Juan de Dios está lleno de esperanza,
fundamentada sobre todo en dos puntos focales: el don de la hospitalidad,
que el Señor sigue regalando a muchos hombres y mujeres en el mundo. A algunos
como religiosos, a otros muchos, hombres y mujeres, como laicos. Esta noticia nos
llena de alegría a todos y es al mismo tiempo, una llamada a organizar y
desarrollar nuestra institución desde esta visión amplia de la vocación a la
hospitalidad, promoviendo en todo, la participación y la sinodalidad.
El segundo punto que el Capítulo
quiere reafirmar es la llamada que el Señor nos hace a seguir extendiendo y
ampliando la misión de la hospitalidad. Somos invitados sobre todo a seguir respondiendo a las nuevas
necesidades emergentes, con el corazón compasivo y misericordioso del Señor y
de nuestro Fundador, San Juan de Dios. No es tiempo para replegarse, “es la
hora para ampliar la tienda y el espacio
del servicio de la hospitalidad”.
Hay otros frutos muy interesantes
que el Espíritu del Señor, nos ha regalado en el Capítulo, en relación con la
vida de los Hermanos y con la Familia de San Juan de Dios en general. Poco a
poco tendremos la oportunidad de hacerlos llegar a todos y sobre todo, será
importante que los recibamos con alegría, con audacia y con una gran
disponibilidad para desarrollarlos y ponerlos en práctica, igual que la
comunidad de Antioquía cuando recibió la noticia del resultado del concilio de
Jerusalén por parte de Pablo y sus compañeros (Cf. Hechos de los Apóstoles,
15,30-31).
Todo fue vivido y “engendrado” a los pies de la Virgen Negra. Deseo ofrecerlo todo a
nuestra Patrona, Nuestra Señora del Patrocinio, para que Ella, al igual que
acompañó y guio a San Juan de Dios a lo largo de su vida (Fuenterrabía, Guadalupe,
Granada…), lo siga haciendo con la Familia de San Juan de Dios, conmigo y con todas
las personas que formaremos el Equipo del Gobierno General. Lo ponemos todo
bajo su protección, para que los buenos frutos del Capítulo General se
multipliquen para bien de la humanidad sufriente, de la Iglesia y de la
Orden.
Encomendamos al Patrocinio de Santa
María Virgen a todos los enfermos y a todas las personas asistidas en los
Centros y Servicios de la Orden y a sus familias, para que los proteja, los
consuele y los cubra con su manto de Madre.
Que paséis una buena fiesta del
Patrocinio de Santa María Virgen, que Ella nos acompañe durante el sexenio que
ahora comienza y que bendiga siempre a nuestra querida Orden y a todos los que
formamos la Familia Hospitalaria de San Juan de Dios.
Hno. Pascal Ahodegnon, oh