Un don "inesperado": un gesto de solidaridad, típico gesto navideño, para los recién nacidos del Hospital de la Isla Tiberina. Y la sorpresa es aun mayor cuando el que hace este don es el Santo Padre.
Ha ocurrido en el Hospital de la Isla Tiberina. El Hospital ha recibido hoy este regalo de Papa Francisco, una nueva incubadora de GE HealthCare para los bebés de la UCI Neonatal. Esta máquina la ha donado la conocida multinacional Bayer al Pontífice en la audiencia del pasado 21 de noviembre y, a través del limosnero de su Santidad, el Cardenal y Arzobispo Mons. Konrad Krajewski, se ha decidido que el destinatario del don sea el Hospital de la Orden de la Isla Tiberina.
La incubadora ha sido entregada oficialmente al Hospital el 18 de diciembre por la mañana, en presencia del Cardenal Krajewski, y de Monica Poggio, Consejera Delegada de Bayer Italia, estando presentes asimismo el Superior del Hospital, el Hno. Ángel López, y el Director de la UCI Neonatal, Luigi Orfeo.
A lo largo de la ceremonia se ha bendecido la incubadora, que se suma a las 16 de cuidados intensivos y a las 13 de cuidados sub-intensivos del servicio neonatal que ha sido rehabilitado recientemente y potenciado para ofrecer a los pequeños pacientes y a sus familias las mejores tecnologías con la mejor Hospitalidad. Este reconocimiento del Pontífice a la labor del Hospital en el cuidado y atención de los recién nacidos y de sus familias es muy importante.
Cada año reciben asistencia en el servicio Neonatal de Cuidados Intensivos del Hospital de la Orden de la Isla tiberina unos 600 recién nacidos. El 80% son bebés prematuros: criaturas muy frágiles y a la vez muy fuertes que necesitan unos cuidados muy especializados, una asistencia constante y también mucho amor.